NO TE DEJARÉ… NUNCA

 

 SI Y AMÉN

"No faltó palabra de todas las buenas promesas que Jehová había hecho a la casa de Israel; todo se cumplió"Josué 21:45 

Te acuerdas cuando papá nos llevaba al parque, cuando con su ayuda nos acercaba al  pasamanos y nos afirmaba que lo podíamos cruzar, cuando llegábamos a la mitad lo mirábamos y le decíamos "papá no puedo más" y Él una vez más nos decía; "tú puedes hacerlo, vas a llegar a la meta, no mires tus manos, no mires el piso, no mires el fracaso, tú eres un triunfador" y al llegar al final lo abrazaba y gritaba "papá lo logré!" como si nunca nadie lo había podido hacer, nos sentíamos como los únicos capaces de culminar tremenda travesía.

Cuan tan importantes son las palabras de afirmación que nuestro Dios nos da a diario en la Biblia, ese libro que contiene la voz de nuestro Padre que nos motiva a seguir, a no desmayar. Sus promesas son como un cheque al portador firmado en blanco, dispuesto para que nosotros coloquemos nuestros nombres y la suma para que lo podamos cobrar en efectivo.

Todos los personajes que están en la Biblia tomaron al menos una promesa del Señor de las miles que hay y las grabaron en sus mentes para luego ver el cumplimiento de cada una.

Te invito a que saques una lista de todas las promesas que el Señor te ha dado, que las mires y las confieses todos los días y en un acto de fe las repitas con la plena seguridad que, si Él lo dijo y tú lo crees, Él lo hará.

Olvídate del tiempo que has invertido y que aún no has recibido la respuesta, estás mas cerca de lo que piensas, "Dios no es hombre para que mienta, ni hijo de hombre para que se arrepienta" Números 23:19 No desmayes, no dejes de creer que su promesa se cumplirá en tu vida, Jesús dijo: "No te he dicho que si crees veras la gloria de Dios?" Juan 11:40

No cuentes cuantos días han pasado después de que el Señor te lo prometió y sigues sin comprobar que ya está ocurriendo, no temas Él siempre es Fiel, Él nunca llega tarde.

Él es tu Padre y nunca te defraudará, vuelve a activar tu fe y te sorprenderás; te invito a que te mires en el espejo de Dios y le digas al reflejo que ves: todas las promesas que te ha dado son en Él sí y en Él amen.

Con amor, Edgar Medina.