NO TE DEJARÉ… NUNCA

 

¡LE IMPORTAS A DIOS!

Algunos de nosotros no estamos muy seguros de Dios. Cuando nos sentamos en la iglesia, o cuando todo va bien en nuestras vidas, es fácil decir: “Dios se encargará de todo”.

Iba del camino al trabajo en bicicleta cuando de repente perdí completamente el control y caí sobre mi pie izquierdo. El dolor era insoportable, no sabía qué hacer. Fui al hospital, me enyesaron el pie y finalmente llegue a mi casa. Vino una pregunta, ¿Por qué a mí?. Pasaron los meses y yo todavía estaba enyesada. Estaba aburrida y decepcionada. No se suponía que a alguien que le sirve a Dios y es líder le pase esto.

Cuando alguien cercano a nosotros muere, el médico nos da un mal informe, enfrentamos problemas financieros, alguien nos traiciona, o perdemos nuestro trabajo, entonces el miedo y la duda nos invaden.

Empezamos a preguntarnos: “¿Realmente Dios me cuidará?”

Por supuesto, la respuesta es un rotundo ¡Sí! Dios cuidará de ti, siempre. Pero asentar esta verdad en tu corazón es clave para el fundamento mismo de tu fe. Hará toda la diferencia en lo malas que resulten las situaciones.

La situación del accidente pudo haber sido mucho peor. Me pude haber caído en medio de la vía y morir. Pero aun en medio de la calamidad Dios me protegió. Y para ser sincera necesitaba un descanso. Necesitaba pasar más tiempo con mi familia. Esto me hizo entender que estoy en las manos de Dios y que para todo hay un propósito. En medio del dolor encontré paz.

Podemos confiar en que Dios cuidará de nosotros. ¡No dudes de Él! El Señor quiere que confíes en Él para que pueda hacer milagros por ti y promoverte. Puedes saber esto: ¡Él cuidará de ti!

 

 

“Como un pastor, él cuidará su rebaño.
    Con su brazo reunirá los corderos, los llevará junto a su pecho
    y llevará a descansar a las ovejas recién paridas”

ISAIAS 40:11