VIVIENDO EN SANTIDAD COMO JESÚS

 

 


Una de las características esenciales de una persona cristiana debe ser su santidad, y esto significa estar separado o apartado de todo aquello que es considerado como pecado, impuro o incorrecto para Dios. En el concepto de muchas personas es algo difícil de alcanzar por las implicaciones que conlleva dejar de hacer cosas que nos agradan o satisfacen el cuerpo pero que nos separan de Dios.

Pero mediante las enseñanzas y ejemplo dados por Jesús podemos alcanzar esa tan anhela santidad como lo dice su palabra en 2 corintios 5:21 “pues Dios hizo que Cristo, quien nunca pecó, fuera la ofrenda por nuestro pecado, para que nosotros pudiéramos estar en una relación correcta con Dios por medio de Cristo”.

Al leer diferentes apartes de la Biblia, podemos ver que Jesús nos dio los principios para morir a nuestra carnalidad y alcanzar nuestra Santidad, tales como:

- La oración, con la cual podemos escuchar las instrucciones de nuestro Padre celestial y de alguna manera identificar lo que podemos estar haciendo bien o mal. Jesús continuamente apartaba tiempo a solas para estar orando y comunicarse con Dios.

- El ayuno, mediante el cual fortalecemos nuestro espíritu y doblegamos los placeres de la carne, el ayuno además permite tener una comunión especial con el Espíritu Santo, quien nos puede redargüir de pecado. Jesús nos enseñó que el estar en ayuno durante 40 días en el desierto lo fortaleció para resistir las tentaciones del enemigo.

- La obediencia, a la Palabra de Dios en la cual se nos revela su voluntad y como nos enseñó Jesús, las debemos acatar en todo momento pues no solo debemos ser oidores sino hacedores (Santiago 1:22).

- huir de la tentación y todo aquello que nos puede llevar al pecado, como las conversaciones incorrectas o malas compañías. Jesús nos enseña que debemos estar orando y velando continuamente para resistir la tentación.  

Es por ello que hoy queremos preguntarte, ¿Estás siguiendo estos principios dados por Jesús para tener una vida en santidad?, o aún continúas llevando tu vida en el yo creo, yo pienso y yo siento?

Debemos dimensionar la importancia de la Santidad pues con ella no solo alcanzamos la tal anhelada salvación, sino que además nos ayuda a tener una   comunión mucho más profunda con Dios, nos da la unción y autoridad para poder alcanzar a otras personas, orar por sanidades y sacar demonios.

Para finalizar, te quiero invitar a que estés en un tiempo con Dios y te determines a ser radical con todo aquello que no le gusta a Él y puedas vivir en santidad, así como Jesús nos enseñó a través de su vida.

Con amor Víctor y Luz


 



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