NO TE DEJARÉ… NUNCA

 

DECIDETE

El ministerio terrenal de Jesucristo estaba llegando a su consumación, y él estaba aprovechando las últimas horas para instruir a sus apóstoles a fin de prepararlos para la nueva etapa que comenzaría para ellos una vez que el Maestro regresara triunfante a su gloria eterna. A partir de ese momento ellos tendrían la responsabilidad de llevar el Evangelio hasta lo último de la tierra. “Pero ahora voy al que me envió; y ninguno de vosotros me pregunta; ¿a dónde vas? Juan 16:5 

La última charla de nuestro pastor Alejandro Rey, fue acerca de que tuviéramos la maleta lista, no la física sino la espiritual, lo que significa estar a cuentas con el Señor. Él nos predicaba acerca de que en ese equipaje no se puede llevar enojo, engaño incredulidad, religiosidad, orgullo, autosuficiencia ni pecado, pues todo ello se convierte en un estorbo para entrar a la presencia del Dios. La salvación es la meta por lo que trabajamos todos los días hasta la hora en que el Señor venga por nosotros

 Esta era una dura prueba para la fe de los discípulos de Jesús. Ellos tendrían que demostrar si su fidelidad era un sistema religioso o realmente habían entendido lo que el Señor les había enseñado durante esos tres años. Y por supuesto, la misma prueba había de ser enfrentada por todo un ministerio liderado por nuestro Pastor y amigo Alejandro Rey.

 Ahora bien, en aquellos momentos los discípulos también tenían que luchar con la tristeza que les producía la partida del Señor. “Pero yo os digo la verdad; os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera; el consolador no vendría a vosotros; más si yo me fuere os lo enviaré” Juan 16:7

De manera personal y sin darme cuenta, el día de mis cumpleaños (24 de enero del 2021) le estaba diciendo un hasta pronto a la persona que Dios colocó en mi vida para transformarme y prepararme, para que de la misma forma que Jesús estaba haciendo con sus discípulos, yo lo hiciera con los míos.

Hoy 23 de enero, después de 2 años de la partida a la eternidad de nuestro amado pastor, entendemos que no solo nos dejó una enseñanza sino un legado que nos prepara para ese gran día, al que cada uno de nosotros va a llegar.

 Cumplir los propósitos de Dios a solas es difícil. Necesitamos la ayuda de Dios, quien nos apoya por medio del Espíritu Santo que habita en nosotros. Solo el Espíritu Santo nos puede guiar a la verdad y nos permite compartir lo que Jesús nos enseñó. “Y cuando Él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio. De pecado, por cuanto no creen en mí; de justicia, por cuanto voy al Padre, y no me veréis más; y de juicio, por cuanto el príncipe de este mundo ha sido ya juzgado”. Juan 16:8-11

 Hoy lo recordamos como ese excelente Padre, esposo, hijo, amigo y pastor que se fue tras las pisadas de Jesús, y a través de su partida hemos podido tener esa verdadera relación con el consolador.

Nos veremos en la eternidad mi amado pastor Alejandro Rey.

 Con Cariño, Willinton Murcia.