NO TE DEJARÉ… NUNCA

 

LA PALABRA DE DIOS PERMANECE PARA SIEMPRE

 

“La hierba se seca y las flores se marchitan, pero la palara de nuestro Dios permanece para siempre” Isaías 40:8

 

En este último tiempo Dios nos ha venido inquietando a adquirir y leer diferentes libros y textos (como complemento a la biblia) entre estos “El Escudero de Dios”, “Quién soy cuando nadie me ve”, “Jesucristo el Sanador”, “entrando en la presencia de Dios” y “Echando fuera demonios”, lecturas que, junto con la Biblia, nos han permitió de alguna manera cuestionarnos sobre lo que realmente conocemos de Dios y todas las dimensiones en las que actúa. En muchas ocasiones queremos tener respuestas a nuestras oraciones, pero desconocemos e incluso minimizamos el poder real que puede llegar a tener su Palabra y la manera en que actúa en nuestras vidas. 

En este sentido, vamos a relacionar algunos factores que inciden de alguna manera en nuestra falta de fe y permiten la duda sobre el verdadero poder de la palabra Dios, así:  

v  La incredulidad hacia la Palabra; aunque llevemos mucho tiempo en la iglesia, en ocasiones nos pasa como los discípulos de Jesús que, aunque convivían con Él y veían los milagros que realizaba, aún no le conocían en espíritu y en verdad. Muy seguramente, aunque leemos la Biblia todos los días, no hemos podido dimensionar su verdadero poder.   

v Permitir la duda, es generar en nuestro interior un estado permanente de incertidumbre, indecisión o inseguridad, consentimos pensamientos con los cuales cuestionamos los eventos sobrenaturales de Dios.                   

v  El rodearnos de personas incrédulas; quiero hacerte una pregunta: ¿Con qué clase de personas te rodeas? ¿Con aquellos que viven el evangelio y tienen un convencimiento de las promesas dadas por Dios o todo lo contrario con personas que están en una continua queja y solo expresan palabas de inconformismo? Si son de los segundos pueden que generen en ti un factor que mengue tu fe. 

v  Limitar a Dios; recuerda que los pensamientos de Dios son más altos que los nuestros, pero en muchas oportunidades queremos ayudarlo en la manera en que actúa en nuestras vidas, acomodamos su Palabra de acuerdo a nuestra conveniencia y queremos doblegar su voluntad, situación que limita su accionar y lo que puede hacer en nosotros.  

v  No tener la presencia del Espíritu Santo, eso hace que no seamos sensibles a todo aquello que nos quiere transmitir mediante su Palabra y sobre sus indicaciones.

Por todo lo anterior, te invitamos a que tomes una actitud receptiva sobre el poder que Dios transmite mediante su Palabra y que siempre permanece para nosotros, “la hierba se seca y las flores se marchitan, pero la Palabra de nuestro Dios permanece para siempre” Isaías 40:8, si en tu caso no se ha cumplido la palabra de Dios, mira cuál de estos puntos quizás has permitido en tu vida para que lo puedas cambiar y así recibir cada una de las promesas que Dios te ha dado en este tiempo.

 

Oración

Señor Jesús perdóname por mi incredulidad, por permitir en mi vida desánimo, amargura, por dejarte esperando en el lugar secreto, por no tener esa disciplina en mi devocional, por permitir en mi vida amistades que me roban la fe, por perder mi primer amor contigo y perder la presencia de mi dulce Espíritu Santo. A partir de hoy; me enfocaré a reclamar tu Palabra y a estar más en tu presencia. Mira que todo esto te lo pido en el nombre de Cristo Jesús, Amén.

 

Con amor, Víctor y Luz