MUJER VIRTUOSA

"La mujer virtuosa es corona de su marido más la mala como carcoma en sus huesos"

 Proverbios 12:4

La mujer virtuosa de la que habla la Biblia es una mujer bendecida que vive de acuerdo con los principios de Dios y dentro de su voluntad. Cuando una mujer vive para el Señor se convierte en una bendición, es amorosa e influye positivamente en la vida de su familia y la de los demás.

Para llegar a ser una mujer virtuosa es indispensable tener una buena comunión con Dios, desarrollar una relación sólida con Él y una fe creciente para que así el Espíritu Santo forme en ella las virtudes del carácter de Cristo.

Solamente a través de Jesús cada mujer puede ser transformada de acuerdo la imagen de Cristo. Muchas veces vivimos situaciones difíciles que no comprendemos pero podemos tener la confianza de que Dios las utiliza para formar algo nuevo en nuestro carácter.

Cuando leí en esta porción de la Biblia que la mujer es corona de su marido, Dios me mostró algo muy especial y es que la corona siempre va sobre la cabeza así que la corona le da esa dignidad de rey al que la porta, en otras palabras no hay rey sin corona.

Una mujer virtuosa es alguien capaz, confiable, trabajadora, diligente, independiente y prudente, piensa las cosas dos veces antes de actuar, es sabia en los negocios, alegre, caritativa, responsable, fuerte, honorable y respetuosa.

Cuando miramos esta lista de virtudes, francamente parece imposible llegar a ser una mujer virtuosa. Pero es allí donde debemos reconocer nuestra necesidad de ser transformadas por Dios, porque no se trata de que nosotras alcancemos la perfección, sino de que permitamos a Dios que nos perfeccione a través de su Espíritu Santo en nosotras.

Y si una mujer renuncia a la posibilidad de ser hecha mujer virtuosa por la gracia de Dios, la opción que le quedaría es ser carcoma en los huesos como lo sería un cáncer o una osteoporosis y esta sería la fórmula perfecta para destruir el carácter y la personalidad del hombre que tiene a su lado. Las palabras de la esposa son supremamente importantes para el esposo, pues la mujer con sus palabras construye y edifica los sueños de su marido o lo humilla, le quita el valor y lo puede llevar hasta el polvo.

Si eres un hombre soltero, debes tener mucho cuidado con quién te casas porque esa mujer puede llevarte hasta lo más alto o puede destruirte. Y es interesante ver que en ninguna de las características de la mujer virtuosa se habla de la belleza como una virtud, lo que quiero decir es que la hermosura de la mujer no es definida en la Biblia por su belleza externa, sino por su belleza interna, por el cúmulo de virtudes, amor, pureza, generosidad, santidad, etcétera.

Y si tú que lees esto eres una mujer soltera, piensa desde ahora qué clase de mujer serás para tu esposo, si una corona o una carcoma. Una corona es forjada y moldeada mucho antes de ser puesta en la cabeza de un rey, así que, todo lo que estás viviendo ahora es parte del proceso para hacer de ti una mujer maravillosa que lleve a su esposo al éxito. Entonces procura ser formada en tu carácter y sobre todo invierte en ti misma, en ser una persona maravillosa por dentro.

Si eres esposo, dale gracias a Dios por tu esposa, especialmente si es virtuosa, pues ella es quien te corona como rey. En otras palabras, sin ella no eres rey. Valora a la mujer que tienes a tu lado, no esperes perder lo que tienes para que lo valores y anheles lo que tenías, la clave está en saber que ella te complementa y te hace un mejor hombre.

Si eres esposa, revisa tus actitudes y nunca sientas que estás debajo de tu esposo. Si eres virtuosa, tu lugar es arriba, pero no para gobernarlo, sino para hacerlo un rey digno. La corona es admirada y deseable, pero no representa el estilo del que la porta sino del que la sabe llevar. Mujer, tú eres demasiado valiosa para Dios pues eres su última creación.

En proverbios 12:4 se nos enseña que el que ama la instrucción y la sabiduría debe seguir amando esa enseñanza y ese conocimiento con una humilde disposición de aprendizaje

Oración: Señor, hoy renunciamos a todo lo que hasta ahora nos había hecho ser menos de lo que tú quieres que seamos. Renunciamos a todo vacío y herida en nuestro corazón que nos hace irrespetar a nuestra familia. Padre, nos humillamos ante ti y te pedimos que nos enseñes a ser mujeres sabias, valientes, con un corazón que te agrade a ti para ser esas mujeres que sobrepasan el valor de las piedras preciosas.

Amado Dios, como hombres llamados por tí para ser Reyes y sacerdotes, te pedimos que formes en nosotros tu carácter a través del Espíritu Santo para portar con honor, respeto, y mucho amor, a esas hermosas coronas que nos has dado como esposas.

Te lo pedimos para la honra y la gloria de nuestro Señor Jesucristo, amén.

Con amor, Flor y Germán.



Comentarios

  1. Que linda reflexión! Dios siga bendiciendo su hogar Florecita y German

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  2. Hermosa palabra y tremenda reflexión ,,que nos lleva a adquirir el verdadero compromiso e intimidad con Dios que nos llevara cada día a ser las mujeres virtuosas que nuestra familia y el mundo necesita,,,hermosísima canción,,

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