El Llamado a Discipular




 “Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo”  

Mateo 28:19

En esta declaración, Jesús deja claro que discipular no es una sugerencia ni una tarea opcional, sino un mandato directo. Él no dice “si quieres” o “si tienes tiempo”, sino “id”. Esta acción implica movimiento, obediencia y compromiso. Ser discípulo no se trata solo de recibir, sino también de dar, compartir lo aprendido y acompañar a otros en su crecimiento espiritual.

El llamado a discipular comienza con una relación con Cristo, se fortalece con el ejemplo de vida y se concreta en el acompañamiento constante. Jesús mismo modeló este estilo de vida: caminó con sus discípulos, los enseñó, corrigió y animó. Hoy, TODOS estamos llamados a hacer lo mismo: invertir tiempo en otros, enseñarles con paciencia y guiarlos hacia una relación más profunda con Dios.

Es muy importante preguntarnos ¿Estoy obedeciendo el llamado a discipular?¿Estoy creciendo como discípulo para poder discipular a otros?

Oración:

Señor Jesús, gracias por confiarme el privilegio de ser tu discípulo y la misión de hacer discípulos que te conozcan y sigan tu camino. Ayúdame a vivir con intención, a enseñar con amor y a guiar con humildad a aquellos que pones en mi camino. Dame sabiduría y paciencia para cumplir con la misión que me has dado, en el nombre de Jesús Amén.

Con Cariño, Santiago Hernández 




Comentarios

  1. Enséñame a ser un discípulo que te ame de verdad !

    ResponderBorrar
  2. Gracias a Dios que nos da el privilegio de ser embajadores de su palabra y por lo tanto debemos dar testimonio con nuestra manera de vivir para que otros deseen lo que Dios ha sembrado en nosotros.

    ResponderBorrar
  3. Amén, que bendición esa hermosa palabra, el espíritu santo nos llama a servir con amor y discipular como Jesús mismo lo hizo.

    ResponderBorrar

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

CÓMO EL ESPÍRITU SANTO RESTAURÓ MI CORAZÓN