ABRE TUS OJOS

“En los cuales el dios de este siglo cegó el entendimiento de los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios.

2 Corintios 4:4

Muchos no ven la verdad porque están cegados espiritualmente. Pide a Dios que quite el velo y les muestre claramente quién es Jesús.

La Palabra de Dios nos enseña que muchas personas viven con los ojos espirituales cegados. No es que no quieran ver la verdad, sino que hay una fuerza espiritual que les impide reconocer el amor de Cristo. Por eso, más allá de convencer con palabras o argumentos, nuestra mayor herramienta es la oración.

En mi vida personal experimenté este versículo de una manera muy real. Por mucho tiempo fui atraído por las tentaciones del mundo: los placeres momentáneos, los deseos que parecían dar satisfacción, pero que al final solo dejaban vacío. Recuerdo que mi corazón estaba dividido, porque, aunque sabía que Dios existía, no podía ver con claridad lo que realmente significaba seguirlo. Era como si hubiera un velo sobre mis ojos.

Fue en un tiempo de quebrantamiento que Dios abrió mis ojos espirituales y me mostró la revelación de la cruz. Comprendí que Jesús no vino a darme una religión, sino una nueva naturaleza. Tomé la determinación de dejar atrás lo que me alejaba de Él, y poco a poco empecé a experimentar un cambio profundo en mi manera de pensar, de hablar y de actuar y todo esto gracias a la guía de mi mentor y de mi Pastora Rossemarie. Hoy entiendo que esa transformación no fue producto de mi fuerza de voluntad, sino del poder del Espíritu Santo.

Por eso, cuando oramos por otros, debemos hacerlo con la confianza de que, así como Dios nos quitó el velo y nos dio una nueva vida, también puede hacerlo con ellos. La oración es el puente entre la ceguera espiritual y la revelación de Cristo.

Te preguntas ¿Cómo puedo aplicar este versículo en mi vida o en la de mis seres queridos o conocidos? Es muy sencillo:

Primero ora con propósito, no sólo pidas por necesidades materiales, también ora por las vidas espirituales de las personas que amas.

Segundo, Intercede con fe. Coloca delante de Dios los nombres de amigos, familiares o compañeros que aún no conocen a Cristo.

Tercero, muestra el amor de Cristo. Tu testimonio es parte de esa luz que Dios quiere usar para atraerlos.

Por último, Confía en la obra del Espíritu Santo, no te frustres si no ves resultados inmediatos; Dios obra en su tiempo.

“Señor, reconozco que muchos están cegados espiritualmente como lo estuve yo y no pueden ver tu verdad. Hoy intercedo por mis hermanos de la fe y Te pido que quites el velo de sus ojos y que tu luz alumbre su corazón. Dame paciencia, amor y fe para seguir orando por mi vida y la de mis seres queridos, confiando en que Tú eres quien da la verdadera libertad. Amén.”

Con amor, David Espitia.



 


Comentarios

  1. Amén ! Abre nuestros ojos a la oportunidad de ser hijos y herederos de tu voluntad ! Atte Rossemarie

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  2. No importa la situación que hoy estoy viviendo por que se que Dios me sostiene de su manos, y que aunque haya momentos y dificultades siempre estaré buscando la presencia del espíritu santo

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  3. amén así es David todo lo puedo en el que el nos fortalece y de paso nos cumple las peticiones 🙏🙏🙏🙏

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  4. Amén!!! Cuando nos determinamos a seguir s Jesús Él quita el velo de nuestros ojos y nos lleva a experimentar un verdadero amor, y es así cuando podemos orar por los demás para que puedan ver el amor verdadero 🙏🏻

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