QUIERO TIRAR LA TOALLA, ¿QUÉ HAGO?

 DIOS Y LAS PRUEBAS

Cada vez él me dijo: «Mi gracia es todo lo que necesitas; mi poder actúa mejor en la debilidad». Así que ahora me alegra jactarme de mis debilidades, para que el poder de Cristo pueda actuar a través de mí” 2 CORINTIOS 12:9

Esta semana hablé con una amiga que conocí hace muchos años en la iglesia, para ella y su familia han sido los tiempos más difíciles, ya que en menos de un mes falleció su padre, a los 20 días su hermano menor, y está luchando con la enfermedad de su hijo, hay tanto dolor, incertidumbre y muchas preguntas. Y también un deseo de sanar y superar todos estos duelos, a pesar de no lograr comprender el porqué de las circunstancias, y nuestro mayor interrogante es ¿Hasta Cuándo?

Cuando estamos a travesando lo difícil, o el llamado “día malo” nuestra mente puede sufrir un bloqueo o anestesia emocional, donde la misma fuerza del impacto nos hace sentir que estamos en otra dimensión, o en un letargo inexplicable, que nos hace pensar si realmente Dios está de nuestro lado, o esto sucedió por consecuencia “de”, o pensamos ¿qué fue lo malo que se hizo?, lo cual es normal ya que estamos en Shock. Aquí es donde inicia un tiempo que la palabra lo llama el valle de Bacca o valle del llanto, donde Dios hace un proceso en lo más profundo de nuestra alma y ser:

1.      Dios trabaja en mi Confianza: Cuando pasé por la pérdida de mis padres en tan corto tiempo, lo que más me llenaba de inquietud era que tuviera la suficiente fuerza para pasar al otro lado y que mi corazón no se desviara a tomar malas decisiones, o perdiera esa fe para continuar. Hoy después de un año y siete meses puedo ver cómo su mano ha ido curando con mucha paciencia la herida, y es ahora donde puedo ver que es necesario soltar y confiar que al final todo estará bien, porque Él Señor cuida de mí.

 

2.     Su gracia Es todo lo que Necesito: “Qué alegría para los que reciben su fuerza del SEÑOR, los que se proponen caminar hasta Jerusalén” (Salmo 84:5).  Aquí El Señor nos dice que esa Gracia es su Espíritu, su poder, su valentía, no se trata de esfuerzos humanos, no es con nuestra lógica o conocimientos que nos repondremos, sólo nos basta con que cada día su favor haga  un obra creadora y restauradora que no logramos imaginar, El señor trabaja en silencio.

 

3.     Su poder actúa mejor en la debilidad: “Ellos se harán cada vez más fuertes, y cada uno se presentará delante de Dios en Jerusalén” (Salmo 84:7) El atravesar el valle del lamento hace que nuestra debilidad emerja y entonces es el momento para tener la mejor actitud de entrega y rendición, solo necesitamos un corazón quebrado, destruido, dispuesto a soltar ese pasado y deshacerse de esa pesada carga; anhelando lo nuevo de Dios y ansiando su paz y reposo. Cuando no hay palabras, ni consuelo suficiente, es que su bálsamo de amor nos repara, y del mismo sufrimiento sale nuestra medicina, y jamás volveremos a ser los mismos.

Carta de tu papá Dios

“Hijo(a) aunque este proceso te ha hecho sentir que te dejé solo(a) en esta carrera llamada vida, y que estamos muy lejos el uno del otro, a pesar de lo difícil ha sido la prueba hoy más que nunca te atraigo a mi amor. Sé que tienes miedo de que te abandone, no temas volver a mis brazos, no te voy a herir, mi regazo te devolverá la seguridad de que a pesar de lo sufrido y de lo perdido, no me equivoqué contigo, he empezado a ver en ti las heridas de mi hijo, te pareces a él, y ellas hoy más que nunca gritan TE AMO, por esto ha valido la pena, estarás más cerca de mí, en la paz de mí reino. Ya no eres la misma persona has Renacido”.

Dedicada a Mamá el ultimo día que la vi con vida “Hoy eres una flor”

Con amor, Marcela Rincón.