NO TE DEJARÉ… NUNCA

 

AMIGOS DEL ESPÍRITU SANTO

 

 

 “Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren.  Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren”

Juan 4:23-24

 

La amistad con el Espíritu Santo es algo fuera de lo común, algo que va en constante cambio y nos conduce a acciones que nos hacen aun mas parecidos a Jesus; nuestra vida deja de pertenecernos, eso incluyendo nuestras decisiones, pensamientos y palabras.

Además sabemos que a lo que más le inviertimos nuestro tiempo, más nos influencia para que seamos imitadores de eso, la pregunta es  ¿en qué, o quién, invertimos nuestro tiempo?

 

“Eres el promedio de las 5 personas que te rodean” es una de las frases más populares de Jim Rohn, empresario y autor estadounidense, muchos otros expertos respaldan esta idea, y la verdad si nos detenemos a hacer el análisis seguramente hemos adquirido palabras, gestos, y hasta costumbres de las personas mas cercanas, probablemente hacemos estas cosas sin darnos cuenta y de manera inconsciente, por ende es imposible negar que definitivamente somos personas influenciables por naturaleza. Por supuesto que Dios nos creó de esta manera con un propósito, y podemos aprovechar esto para cada dia conocer más al dulce Espíritu Santo y así parecernos más a Jesús.

 

 “Pero deseamos que cada uno de vosotros muestre la misma solicitud hasta el fin, para plena certeza de la esperanza, a fin de que no os hagáis perezosos, sino imitadores de aquellos que por la fe y la paciencia heredan las promesas”

Hebreos 6:11-12

 

Ahora bien, la única manera en la que yo me puedo convertir en un imitador de alguien es pasando tiempo juntos, como en el caso de los amigos. Algo muy parecido vivieron los discípulos de Jesús mientras él los acompañó en la tierra, lo tenían bien cerca y compartían con él bastante, ya conocían los que le gustaba, lo que anhelaba y la razón por la cual era tan apasionado. No obstante, cuando Cristo “se fue” de este plano terrenal, nos dejó a nuestro Paracleto, el mejor y único Consolador (lo digo por experiencia) a un gran amigo, el dulce Espíritu Santo. Te animo a que cada dia te puedas acercar más a su presencia y él se convierta en tu mejor amigo, cuéntale lo que piensas, lo que sientes, lo que anhelas; el Espíritu Santo está contigo todo el día dispuesto a escucharte y a responderte, aprovecha este maravilloso privilegio.

Este blog devocional es un apoyo muy bueno, pero no te quedes solo con este pedacito del pastel, lee y estudia la Biblia, toma apuntes en tu cuaderno devocional y una vez empieces a pasar más tiempo con el Espíritu Santo, te aseguro que será tu mejor amigo.

Con amor, Maria Alejandra Rey.