PIENSA BIEN

Hoy es un día para sincerarnos...la mayoría de nosotros no somos quienes creemos ser. En el mejor de los casos, nuestra manera de pensar está un poco distorsionada; sin embargo, en la mayoría de los casos, esta necesita cambiar.

La Palabra de Dios nos exhorta a "renovar" nuestra mente. Eso significa entregar nuestra antigua manera de pensar, nuestras opiniones, ideas, creencias y actitudes egoístas, para poder recibir una nueva perspectiva que Dios desarrolla en nuestra vida. Estos pensamientos piadosos son nutridos al leer a diario la Biblia y al reflexionar en cuanto a las enseñanzas de su Palabra. Como seguidores de Jesucristo se nos dice: "No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta" (Romanos 12.2).

Es de esa renovación de nuestros pensamientos que surge un cambio en nuestra manera de hablar y en nuestro comportamiento. Mientras somos renovados en esos aspectos, nuestra relación con otros también se renueva. Y mientras eso sucede, el mundo que nos rodea también cambia. Todo comienza en la mente, con aquello que optamos por pensar y en lo que nos complacemos.

Usted tiene la capacidad de escoger sus pensamientos. En cualquier momento puede enfocar su mente en un nuevo asunto, responsabilidad o problema a resolver, en lugar de enfocarse en pensamientos negativos que robarán su paz y le impulsarán a desobedecer y a pecar. Ante cualquier situación que enfrente, tiene la facultad de decir: "Escojo confiar en Dios".

Además, todo hijo de Dios que escoge mantenerse firme contra patrones de pensamientos dañinos, contará con una vía de escape ante esa circunstancia. Si usted da el paso inicial para buscarlo, el Señor le ayudará a enfocar su mente en otro asunto que no esté relacionado con la tentación que enfrenta.

Al guardar nuestra mente, protegemos nuestra paz. Sin importar las pruebas que enfrente, si clama a Dios en oración y acción de gracias, Él le asegura paz interior (Filipenses 4.6, 7). Y si enfoca su pensamiento en aquello que es verdadero, honesto, justo, puro, amable, de buen nombre y digno de alabanza, es porque depende del Señor con una fe que va en aumento.

Nunca podrá agotar su facultad de pensar acerca de la bondad y grandeza de Dios. Escoja actuar de la misma manera que Jesucristo lo hizo. Proteja su vida de oración. Proteja sus pensamientos. Busque al Padre y todo aquello que lo agrada. Su Palabra promete que si llenamos nuestra mente con aquello que es puro y digno de alabanza, "el Dios de paz estará con [nosotros]" (Filipenses 4.9).

Tomado del libro 📕 de Charles Stanley ( Las bendiciones del Quebrantamiento) 

Con amor, Rossemarie Rizzo Martínez.

Pastora MCI Bogotá.



Comentarios

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

NO TE DEJARÉ… NUNCA