¿TIENES ABOGADO?

¿Alguna vez has escuchado la frase, “Jesucristo, nuestro abogado” y te preguntaste su significado exacto? ¿Por qué está abogando por nosotros, y qué es un abogado precisamente?

La frase se encuentra en 1ra Juan 2:1: “Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo.” Entonces, ¿qué es un abogado? La palabra griega utilizada aquí es “Parákletos” y significa ser un ayudante, un intercesor o consejero.

Ahora, la palabra "Abogado" es un término legal. En general describe a alguien que se pondrá de parte nuestra para ayudarnos en tiempos de necesidad o problemas. Así actúa Jesús en nuestras vidas pues Él se pondrá de nuestro lado para ayudarnos en tiempos de luchas y dificultad. Nuestra salvación se apoya sobre lo que Cristo hizo por nosotros, y no podemos añadir nada a su obra terminada, lo que Jesús hizo en la cruz es todo lo que necesitamos para ser salvos.

"Por una vida que no he vivido, por una muerte por la que no tuve que pasar, por causa de la vida de otro, por causa de la muerte de otro, he podido asegurar toda una eternidad"

El Evangelio de la gracia de Dios se caracteriza por tomar a un pecador condenado al infierno, al que simplemente por su fe en Cristo lo convierte en parte de la familia de Dios, entonces se convierte en hijo y coheredero juntamente con Cristo, pero aquí el punto importante es la relación con el Padre. Si bien ya fuimos salvos por medio de lo que Jesús hizo por nosotros y el aboga por nuestra justificación, el mensaje de este versículo también es el llamado a no pecar. Dios quiere que vivamos de una manera que le agrade a Él, es decir, vivir una vida de obediencia a su Palabra; sabemos que la sangre de Jesús nos está limpiando constantemente, pero también debemos reconocer que en nuestras vidas hay imperfección y que debemos acudir a Él y confesarle nuestros pecados “Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.” 1 Juan 1:9.

Apocalipsis 12:10 dice “Y oí una gran voz en el cielo, que decía: Ahora ha venido la salvación, el poder y el reino de nuestro Dios y la autoridad de su Cristo, porque el acusador de nuestros hermanos, el que los acusaba delante de nuestro Dios día y noche, ha sido arrojado.” Cuando el enemigo nos acusa, Jesús interviene por nosotros como nuestro abogado, pues Él ya murió por nuestros pecados. Sin embargo, no significa que tengamos un pasaje libre para vivir en libertinaje, es un pasaje para podernos acercar al Padre y en humildad reconocer que lo necesitamos a Él y que nuestro Abogado es mucho mayor, más importante que el acusador y la defensa que nos hace sustentado en su palabra nos trae paz y seguridad. “Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque mayor es el que está en vosotros, que el que está en el mundo.” 1 Juan 4:4

Amigo lector, confía en que tienes un compañero que aboga por ti, el mejor de los abogados está de tu lado y te defiende de las artimañas de tus enemigos, recuerda sus promesas en medio de los procesos por los que estás pasando, tal vez ahora no lo entiendas, pero recuerda lo que Él dijo en su palabra “Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos.” Isaías 55:8-9

Oración:

Amado Dios, Padre mío, gracias por traer a este mundo a tu hijo Jesús para morir por mis pecados, sé que no merezco nada, mi orgullo me sacó del jardín, pero tu humildad puso el jardín en mí. Gracias por tu gracia inmerecida, ayúdame cada día a recordar el sacrificio que Jesús hizo en la cruz, sé que soy pecador y que merecía esa cruz, pero tu perfecto amor lo entregó todo por mí y ahora yo quiero entregarlo todo por ti, Te amo Jesús, amén y amén.

Con amor, Karen Guarín.

Te invito a que termines este tiempo adorando al Señor con esta canción: 


Comentarios

  1. Amen Karen. Hay un juicio y allí nuestro cordero presentará sus alegatos y seremos libres de la condenación eterna. El precio? Su sangre preciosa 💖

    ResponderBorrar

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

QUIERO TIRAR LA TOALLA, ¿QUÉ HAGO?

NO TE DEJARÉ… NUNCA