NO TENGAS MIEDO

“DIOS es mi salvación, confiare en él y no tendré miedo.

El señor DIOS, es mi fuerza y canción; se ha convertido en mi salvación” ISAIAS 12:2

¿Cuántas veces hemos permitido que el miedo llegue a nuestras vidas?

Cuando el miedo entra a nuestras vidas puede paralizarnos, incluso nos puede hacer creer que no podremos llegar a hacer o conquistar nuestras metas o proyectos, nos puede hacer sentir tan angustiados que nubla nuestros pensamientos y nuestra comunión correcta con DIOS.

Al perder un trabajo, una nota en la universidad, un negocio, una relación o un ser querido, puede venir el temor y la incertidumbre de qué pasará.

Mi esposa y yo hemos experimentado momentos de temor e incluso de angustia, como cuando nuestro querido pastor Alejandro viajó al cielo, o también cuando uno de los seres más queridos en nuestra familia, Papá Carlos murió. En esos momentos nos sentimos perdidos, llenos de temor y miedo al futuro que nos tocaría afrontar en nuestra familia por la partida de nuestro ser amado y en el ministerio por la partida de nuestro amado pastor. Pero fue en esos momentos cuando entendimos que, para vencer el temor, el único que nos podía sostener y direccionar se llama ESPIRITU SANTO.

Querido lector, si estás pasando por ese desierto, incertidumbre y el temor ha llenado tu vida, te quiero recordar que nuestro amado JESÚS ya pagó todo por ti y por mí y nos dejó al Consolador, a nuestro consejero, a nuestro amado ESPIRITU SANTO, que nos ayuda en esos momentos de debilidad.

Le pediré al Padre y les dará otro consejero para que este siempre con ustedes “

JUAN 14-16 PDT

ORACIÓN:

Amado ESPIRITU SANTO, te pido que tú seas mi guía, que no importando las circunstancias que esté atravesando, tú seas mi consejero, mi guía y mi aliento. Gracias JESÚS por el sacrificio que hiciste por mí en la cruz, te amo DIOS.

CON CARIÑO MAURICIO Y CAROLINA GAONA




Comentarios

  1. Ante la prueba o la dificultad, la única salida que nos queda es poner nuestra fé y esperanza en las promesas de Dios

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  2. El hermoso Espíritu Santo nuestro consolador y ayudador en todo tiempo.

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  3. amén maito y caro. Así es solo de mano de Dios atravesaremos toda dificultad y El nos sostendrá

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