NO TE DEJARÉ… NUNCA

 

UN LIBRO ABIERTO

“Nuestras cartas sois vosotros, escritas en nuestros corazones, conocidas y leídas por todos los hombres; siendo manifiesto que sois carta de Cristo expedida por nosotros, escrita no con tinta, sino con el Espíritu del Dios vivo; no en tablas de piedra, sino en tablas de carne del corazón”

2ª. Co. 3:2

Querida familia en Cristo, es un privilegio compartir con ustedes parte de lo que el Señor ha hecho conmigo. Mateo 5:16 dice:

“Así alumbre vuestra luz delante de los hombres para que vean vuestras obras y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos”

Cuando nuestros caminos son agradables delante de Dios, aún a nuestros enemigos hace estar en paz con nosotros y entonces vemos que todo sale bien. Y si por algún motivo no salen las cosas como nosotros queremos, es porque Dios está obrando, aunque no veamos como lo está haciendo. Y sé que algún día papito Dios nos contará muchas cosas que hoy no entendemos.

Hace 39 meses perdí a mi esposo y todo se tornó confuso, entonces me pregunté qué sería de los sueños que había tenido. Pero a pesar de no estar mi esposo, Dios empezó a hacer realidad los planes que tenía para mí y, en este tiempo, he podido viajar a México, Europa y a Estados Unidos. Nunca imaginé llegar a la MCI Miami, pero Él lo quiso así. Y he podido en todo momento hablar del único Dios vivo, dándole gloria por permitirme ver cumplida su voluntad sobre mi vida.

Es por eso que oro para que Dios me haga ese libro abierto en el cual muchos puedan leer de su presencia en mi vida para poder acercar a otros a su amor.

¿Eres tú ese libro abierto?

Oración: Padre Santo, gracias por mis luchas, mis dolores y mis debilidades, pues en medio de estas cosas tú me das la victoria. Por favor, haz que mi fe no falle, sino dame tu gracia y tu favor para levantarme y salir en victoria para que otros puedan ver tu amor en mi vida. En el nombre de Jesús, gracias. Amén.

Con amor, Doris Sánchez.