Cómo Dios dirigió mi carrera a través del Espíritu Santo

 Cómo Dios dirigió mi carrera a través del Espíritu Santo 

 

“Pon en manos del SEÑOR todo lo que haces, para que tus planes se hagan realidad.”

‭‭Proverbios‬ ‭16‬:‭3‬

 

 

Muchas veces soltar y dejar todo en manos del Señor es algo que nos cuesta, no tener el control del día a día o del futuro nos lleva a vivir en frustración y ansiedad. Personalmente era de este tipo de personas que siempre quería tener todo calculado para lograr cada meta u objetivo que me proponía; crecí siendo muy independiente y me costaba pedir ayuda, mis oraciones diarias siempre eran “Señor que todo salga como sueño y mi corazón lo anhela” nunca puse delante de él lo que hacía y nada me salía como quería, entré en un estado de frustración y cuestionarme todos los días ¿Por qué no puedo, si todo lo estoy haciendo como se debe?. 

 

Todo esto lo comencé a vivir desde mi segundo semestre de universidad, las dificultades me llevaban a rendirme y creer que no tenía las aptitudes para sacar adelante mi carrera (comunicación social) así fue durante un largo tiempo, específicamente tres años y medio quise demostrarme autosuficiente y no necesitar dirección del Señor, ya sabía dónde me había puesto, el resto corría por mi cuenta; no contaba que para llegar donde quería tenía que estar sujeta de su mano y dejar que él se encargará del resto, el afán de un futuro exitoso y reconocimiento me llevó a terminar una carrera de cuatro años en siete. Siempre que estaba a punto de culminar mi fecha de grado se presentaba un mínimo inconveniente que me hacía retroceder y me sentía estancada, no veía solución ni respuesta y todo porque otra vez quería hacer lo que solo el señor podía hacer. 

 

La frustración que vivía en ese momento me llevó a humillarme ante el Señor, rendirme y entregar todo lo que yo quería y como lo quería, decidí dejar de luchar con mis fuerzas para que el comenzara con las suyas; allí vi cómo el Espíritu Santo renovó mis fuerzas para seguir sin prisa, pero sin pausa todo en los tiempos de él, me ofreció paz y tranquilidad en medio de la incertidumbre por mi futuro (yo creía que no servía para eso y que me había equivocado de carrera) en medio de este proceso el aparejó todo y me permitió hacer un diplomado en periodismo deportivo el cual puse en sus manos, me sacó en victoria siendo una de las estudiantes que cumplía con los requisitos para hacer cubrimiento en radio y televisión; me sorprendió más de lo que imaginaba, me recordó por qué y para qué me había llevado a estudiar esta carrera. Hoy oficialmente puedo decir que soy comunicadora social y periodista con doble titulación. 

 

Son innumerables las veces que me acerqué a Dios preguntándole la razón de lo que estaba viviendo, pero siendo sincera, de muy pocas tengo la respuesta exacta, sin embargo, he visto que al confiar en Dios y su fidelidad él aquieta mi mente y corazón. 

 

¿Sabes? Hoy después de muchos procesos y aún preguntas sin responder por parte de Dios, puedo decir con toda seguridad que el Señor siempre cumple lo que promete, solo depende de ti si confías en él sin importar la circunstancia y permites que él cumpla su plan diseñado para ti como dice Jeremías 29:11

“Sé muy bien lo que tengo planeado para ustedes, dice el SEÑOR, son planes para su bienestar, no para su mal. Son planes de darles un futuro y una esperanza.”

 

Querido lector hoy te invito a que le pidas al Señor que quite de tu mente y corazón toda idea de querer tener el control de todo y que el Espíritu Santo traiga paz y tranquilidad para vivir seguro en sus planes; deja que él te sorprenda y te dé más de lo que pides.

 

Con cariño Caroline Piza.