MULTIPLICACIÓN COMO FRUTO NATURAL
“Juntos alababan a Dios, y todos en la ciudad los querían. Cada día el Señor hacía que muchos creyeran en él y se salvaran. De ese modo, el grupo de sus seguidores se iba haciendo cada vez más grande.”
Hechos 2:47 TLA
El alabar a Dios juntos, con nuestros consiervos, discípulos, líderes y con la congregación, hace que crezcamos de sobremanera. Dios quiere una iglesia que viva en comunión, en alabarlo con sencillez y humildad.
Versículos antes de este, nos cuenta que los discípulos decidieron vivir como una familia: “y decidieron vivir como una gran familia. Y cada día los apóstoles compartían con ellos las enseñanzas acerca de Dios y de Jesús, y también celebraban la Cena del Señor y oraban juntos.”
Hechos 2:42 TLA
Esto nos recuerda que el verdadero crecimiento lo da Dios, no de estrategias humanas, sino de un corazón rendido, que se rinde diariamente.
Cuando los creyentes glorificaban a Dios al dorándolo y amando a los demás, las personas alrededor lo notaban y querían experimenter lo mismo. Esos testimonios hacían que otros quisieran conocer al Señor, y no eran palabras vacías, sino acciones llenas de pasión por Dios.
Si de pronto no estábamos tan alineados con estos versículos, si quizás no estabas viviendo adorando a Dios o viviendo en unión con los demás, hoy te hago esa invitación. Se tu la luz de tú familia, de tu grupo de trabajo o de tu universidad,donde tu seas quién ore y los lleve a adorar a Dios.
3 tips para que tu célula crezca
1. Se constante: hazla cada semana para que se cree un hábito para ti y para tus invitados
2. Se creativo: haz actividades para que a tus discípulos retengan el mensaje y puedan llevarlo a otros
3. Se intencional: se amigo/a de tus discípulos, llámalos o escríbeles como han estado en su semana, desde ahí comienza la confianza y la unión.
Oremos juntos:
Papito Dios gracias por el crecimiento que vas a traer en cada área de mi vida, te pido perdón si mi corazón no había estado totalmente rendido a ti, si no había vivido en unión con mi célula, te entrego todo y dime cómo poder crecer en mi relación contigo y así que los demás lo noten y lleguen a adorarte y amarte. Te amo Jesús, amén.
Nicolle Rey
Gracias Nicolle, por la enseñanza, el fruto es algo natural que viene cuando el señor ve nuestros corazones llenos de amos por las almas
ResponderBorrarEl vivir rendido a los pies de Jesús nos deja poderle servir de una manera incondicional y nos da el amor suficiente para pastorear ! Atte Rossemarie Rizzo
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